En 1940, aparece un nuevo estilo: el be-bop, que surgió en Harlem, Nueva York y representa la primera vanguardia que produce una verdadera revolución dentro del mundo del jazz. Este estilo, se caracteriza por la improvisación sobre una progresión de acordes, con más velocidad y frases más largas, frenéticas y complejas. También incluía sensaciones menos agradables que las conocidas hasta ahora y era una música que transmitía una sensación de ''nerviosa intranquilidad''.
Estos nuevos músicos consideraban que el jazz que se practicaba hasta ahora había llegado al final, ya que siempre se repetían las mismas fórmulas musicales. Así que contrapusieron pasajes de gran rapidez, innovaciones armónicas y otras excentricidades instrumentales que los permitían reaccionar contra las limitaciones y el trabajo de las Big Bands.
El fundador del be-bop fue Dizzy Gillespie, trompetista, que transformó los clásicos esquemas del jazz con la incorporación de armonías complejas y ritmos afrocaribeños. No obstante, el líder de este estilo es Charlie Parker, saxofonista, que creó melodías de una manera muy elaborada y con una gran variedad rítmica.
bé
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